Increíble pero cierto
Hay cosas que, por más que le busquemos la explicación, no la tienen, así lo que sucede entre la comunidad hispana y la alcaldía de West Palm Beach es algo increíble pero cierto.
A pesar del crecimiento hispano dentro de la municipalidad, que ya llega a casi el 25% los lazos de comunicación que existían entre los hispanos y la alcaldía de West Palm Beach, lejos de aumentarse, ahora se han disminuido.
Aunque se creó un distrito hispano para lograr una representación hispana en la comisión y la designación del Latin Quarters, no se ha tenido en cuenta, la necesidad de un departamento que se ocupe de escuchar las quejas, preguntas y sugerencias de los residentes hispanos que no hablan inglés para brindarles una respuesta inmediata.
A principios de la década de los 90, con el crecimiento hispano, la entonces alcaldesa Nancy Graham, creó la Comisión Hispana ante la ciudad de West Palm Beach, que se reunía todos los lunes en el recinto de la comisión.
Años más tarde, al desaparecer la comisión debido a pugnas políticas, la misma alcaldesa Graham creó el Equipo de Respuesta de la Oficina del Alcalde, que no solo atendía los problemas de la comunidad hispana, pero también de todos los residentes en general, con una persona totalmente bilingüe contestando al teléfono.
La disolución del Departamento de Servicios a los Vecindarios/Alcance Hispano, en el mes de junio, ha dejado a la comunidad hispana sin una voz en la alcaldía.
Hasta ahora no se ha producido una solución viable, la alcaldía ha propuesto que se habilitará una línea telefonía, para que los que no hablan inglés dejen los mensajes, que se devolverán dentro de las 24 siguientes a la llamada, por alguien que hable español, que trabaje en los departamentos a donde vaya dirigida la pregunta o queja o de lo contrario, los residentes deberán comunicarse por medio de la tecnología moderna.
Es inconcebible, que se le pida a miembros de la tercera edad que no conocen el idioma y menos el lidiar con una computadora que espere 24 horas a que se le dé una respuesta, cuando hace solo seis meses una voz viva, los ayudaba.
Nada que de que los hay, los hay, lo que hay es que dar con ellos
Mirta Luaces
mluaces@atlantikas.com