
WASHINGTON, D. C. – El secretario de Transporte de Estados Unidos, Sean P. Duffy, anunció este viernes una acción de emergencia que limita drásticamente quién puede obtener permisos y licencias comerciales de conducir (CLP y CDL por sus siglas en inglés) para no residentes. La medida, efectiva de inmediato, responde a una auditoría nacional de la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes (FMCSA por sus siglas en inglés) y a una serie de choques fatales provocados por conductores extranjeros.
La investigación reveló un patrón “catastrófico” de emisión ilegal de licencias a choferes sin derecho a ellas y fallas en el marco regulatorio vigente. “Lo que hemos descubierto debería alarmar e indignar a todos los estadounidenses”, dijo Duffy. “Se están entregando licencias para operar camiones de 80,000 libras a conductores extranjeros peligrosos. Es una amenaza directa para cada familia en la carretera, y no lo voy a permitir”.
Nuevas reglas
De ahora en adelante, los no ciudadanos solo podrán optar por una CDL no domiciliada si cumplen requisitos más estrictos: contar con una visa de trabajo válida y superar una verificación federal de estatus migratorio a través del sistema SAVE.
Señalamiento a California
La FMCSA detectó el mayor incumplimiento en California, donde más del 25% de las licencias revisadas fueron emitidas de manera incorrecta, incluso a personas cuyo permiso de permanencia legal había expirado. En un caso, un conductor brasileño recibió autorización para manejar autobuses escolares pese a haber perdido su estatus migratorio meses antes.
Por ello, el Departamento de Transporte ordenó a California:
Suspender de inmediato la emisión de CDL no domiciliadas.
Identificar todas las licencias activas que no cumplen con la normativa.
Revocarlas y reemitirlas solo si ajustan a los nuevos criterios federales.
El estado tiene 30 días para acatar la orden o enfrentará la retención de fondos federales de carreteras, que empezarían en 160 millones de dólares el primer año y se duplicarían en el segundo.
Otros estados bajo la lupa
Colorado, Pensilvania, Dakota del Sur, Texas y Washington también fueron señalados por prácticas inconsistentes con las regulaciones federales. La FMCSA vinculó al menos cinco accidentes mortales desde enero con conductores que tenían estas licencias.
Contexto político
La medida se enmarca en la orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump a inicios de año, que designó al inglés como idioma oficial del país y ordenó reforzar la seguridad en las carreteras. En meses recientes, el secretario Duffy ya había lanzado auditorías nacionales, un paquete de apoyo a camioneros y directrices más estrictas sobre el dominio del inglés para operadores de vehículos comerciales.
“California debe corregir su desorden de inmediato o no dudaré en retirar millones en fondos”, advirtió Duffy. “El pueblo estadounidense merece saber que solo conductores legales y calificados manejan camiones pesados en nuestras autopistas”.